Ella es un referente de superación, sacrificio, esfuerzo y entrega. Una mujer joven, ciclista olímpica, madre y luchadora. Evelyn Yesenia García de Vega es una joven santaneca de 32 años que es parte del proyecto “El País que viene: Opinan los jóvenes”, y plasmará una reseña de su vida y sus logros a nivel personal y profesional en este libro. A los 16 años se interesó por el ciclismo como rama deportiva que, hasta la fecha, practica y la ha hecho acreedora de múltiples reconocimientos.
Es madre de dos mellizas y planea seguir haciendo lo que más le gusta: el deporte. En el futuro se ve involucrada en la política como medio para poder lograr más cambios a nivel social y en pro de la juventud del país.
¿Cuál es tu filosofía de vida?
Esfuerzo, sacrificio y entrega.
¿A qué deben aspirar las nuevas generaciones de El Salvador?
A ser mejores seres humanos, porque ahora es difícil encontrar personas con cosas buenas y sentido común, también pensar en el futuro, porque todo el mundo piensa en el ahora y mañana “ya no voy a estar” dice la gente. No les interesa. Y si dañan y tiran basura a la calle, no van a estar cuando vean el resultado final. Esa mentalidad del ser humano de este momento, podría ser un cambio para futuro, porque todo el mundo piensa en el “ya”, en “esto es para mí” y no pensar en lo que van a heredar.
¿Qué podemos hacer los jóvenes ante el actual panorama de violencia e inseguridad?
Desde donde estemos, buscar la manera de prepararnos mejor para, cuando se de una oportunidad de poder actuar y ayudar al país, hacerlo, porque hablar y no actuar es fácil, así como criticar y manifestarnos. Desde donde estemos podemos empezar a abonar algo. Tenemos que prepararnos intelectualmente: leer, ver qué hacen otros países también, porque creo que tenemos varios espejos en América que podemos imitarles lo bueno, que han pasado lo que estamos pasando y lo han superado. Yo creo que hay que informarnos sobre esos proyectos que ya se aplicaron y tratar de aplicarnos acá. Otra cosa, acá el conductor se enoja porque hagan una competencia un domingo en las calles, entonces se molestan cuando no pasa nada por nada malo por hacer eso, entonces aquí, si el de arriba no da la orden para que todos colaboren, nada va a crecer.
¿Qué piensas del conformismo en los jóvenes salvadoreños?
No es aceptable, más el entorno que se vive en el país da para eso. El joven no se motiva, porque no hay fuentes de trabajo, no hay ejemplos, referentes a seguir y que digan “no, yo quiero superar. Mirá cómo creció fulano, mirá la familia que hizo y se fue de viaje”. Entonces yo creo que el mismo país está en esa situación donde cae el joven por eso, porque no tenemos nada alrededor que sea diferente, que motive, que le dé esperanzas al pueblo de que esto va a cambiar. Todo es una cadenita: si algo mejora cambia la mentalidad del joven. Ahora la gente va a la escuela, pero si no hayan trabajo al salir… me imagino que van solo por ir, pero no por ejecutar algo al graduarse. Todo eso es por lo que se está viviendo en estos momentos. Si algo cambia, que de una esperanza al joven para que cambie su actitud, más que todo, la mente. Todo lo maneja uno con la mente: si uno está mentalmente positivo y a todo lo que va sucediendo le va buscando el lado bueno, aunque hayan cosas que no son tan correctas, pero veamos lo bueno, para que pese más lo bueno en lugar de lo malo.
¿Cómo ves a El Salvador en diez años?
Si desde ya se hacen cambios y mejoras y los jóvenes cambian de actitud, yo pienso que en diez años se puede ver una mejoría, tanto en lo económico del país como en todo. Tantas cosas que el país tiene que… bajar deudas, esto, tener más fondos para que el país siga creciendo, darle las herramientas para que, realmente, lo que necesita la gente, es que le enseñen cómo sembrar y trabajarlo, no solamente tener la cosecha hecha, sino aprender a hacer crecer eso. Si en diez años… si algo cambiamos desde ya, podemos ver un resultado. No pensemos solo en el ahora, tenemos que pensar de aquí a 20 años.
¿Qué les dirías a los jóvenes que quieren iniciarse en un deporte?
El deporte, aunque no se vaya a hacer de profesión, ayuda en tu formación, en tu salud. Ayuda a tener un entorno diferente, porque usted llega donde están practicando el deporte, usted encuentra gente que se levanta temprano, positivismo, que quieren hacer esto, lo otro, que estoy a dieta… como sea, pero usted encuentra gente luchadora, gente que todos los días busca mejorar. Eso es lo que necesitamos: que hayan escuelas de karate, de lucha, de todos los deportes. La familia tendría que llevar a sus hijos a una escuela de algo, porque es su segunda escuela después del hogar. Una escuela es para que eduquen y formen, independientemente de si va a ser un deportista de alto rendimiento. La idea es que, el mentor, enseñe disciplina, esfuerzo, entrega… esas cosas que, en la vida, usted la va a aplicar, no solo en el deporte. El deporte puede ayudar al cambio que necesita el país, siento yo.